Los Rolls-Royce son considerados los mejores automóviles del mundo. La combinación de lujo, tradición y tecnología que ofrecen no tiene parangón en la industria actual. Sencillamente, Rolls-Royce está en la cima del lujo hecho automóvil. Es una marca en la que todo es posible.
El departamento de personalización de Rolls es la envidia de toda la industria. Y aun así, algunos preparadores independientes se atreven a personalizar los Rolls-Royce, pero solo uno es capaz de aportar un toque único y al mismo tiempo respetar la tradición centenaria de la marca en términos de estilo, calidad y potencia. Ese preparador no es otro que Spofec.
Detrás de Spofec están los diseñadores e ingenieros de Novitec. Este especialista de Ferrari es el único preparador de todo el mundo autorizado a conservar el “cavallino rampante” en sus creaciones, lo cual dice mucho de la calidad de su trabajo. Visto así, solo él podía superar el desafío que supone personalizar un Rolls-Royce. Y lo demuestra con su nuevo programa de personalización completo para el Rolls-Royce Phantom de última generación.
La elegancia es el fruto de la unión de la forma y de la función
A la hora de diseñar un kit carrocería para un Rolls-Royce toda la dificultad está en lograr un conjunto que se note y al mismo que se integre visualmente en el coche, es decir, que no parezca un añadido o que pertenezca a otro coche. Aquí, los diseñadores desarrollaron los componentes del kit carrocería tomando en cuenta el lenguaje estético de Rolls-Royce, la eficiencia aerodinámica y los retos del montaje que supone un kit de estas características. La forma y la función van de la mano en este diseño. Aerodinámicamente eficiente y ligero, el kit carrocería está fabricado en fibra de carbono. No por una cuestión de ligereza, sino por una cuestión de calidad del resultado final.
Con la fibra de carbono, Spofec se asegura un acabado totalmente liso que no desentonará con los paneles de carrocería del coche y que, además, permitirá aplicar con mayor tranquilidad y seguridad las diferentes capas de pintura que se usan en Rolls-Royce, única manera de obtener la misma intensidad en los colores que la marca.
Con la incorporación del parachoques delantero Spofec (con spoiler integrado), el Phantom se ve completamente diferente y al mismo tiempo parece que sea un elemento diseñado por la propia marca. No solamente el parachoques cambia la personalidad del coche, lo acerca visualmente al asfalto y aporta apoyo aerodinámico al tren delantero. El parachoques trasero, diseñado de una sola pieza como el frontal, y el sutil alerón le dan un carácter más atlético a este imponente salón rodante.
Por su parte, los faldones laterales unen visualmente los dos parachoques al mismo tiempo que hacen parecer al Phantom más bajo. Se caracterizan, además, por una aleta de tiburón incorporada al diseño detrás del paso de rueda delantero. Es un elegante guiño a la pizca de deportividad que Spofec insufla al coche.
Suficiente: 685 CV y 1.010 Nm para el V12 6.75 litros
El Rolls-Royce Phantom se mantiene fiel a la tradición de la marca del V12 de 6.75 litros. Sin embargo, con la adopción de los V12 diseñados por BMW, la marca inglesa rompió con el hábito de no desvelar la potencia de sus coches. Cuentan que cuando un cliente tenía curiosidad por la potencia del motor de su preciosa adquisición, la respuesta era invariablemente: “suficiente”.
Con 571 CV en el nuevo Phantom, se puede decir que tiene una potencia suficiente para la mayoría de los clientes. Spofec discrepa y gracias a una centralita adicional consigue que la potencia alcance los 685 CV y que el par máximo culmine en 1.010 Nm. Ahora sí, podemos decir que es realmente “suficiente”. De hecho, así equipado el Phantom cubre el 0 a 100 km/h en 5 segundos, aunque la velocidad máxima se mantiene autolimitada a 250 km/h.
Spofec no se olvida del chasis. Para la suspensión neumática autonivelable con amortiguadores con control electrónico, los cuales se adaptan al terreno de forma proactiva en lugar de reactiva, el preparador alemán ha desarrollado un módulo de control electrónico que mantiene el coche 40 mm más bajo con respecto al modelo de serie hasta los 140 km/h, velocidad a partir de la cual la suspensión vuelve a su altura de serie.
Todo en la preparación de Spofec está hecho para que se integre perfectamente al lenguaje estético y a la calidad técnica de Rolls-Royce. Todo ha de ser diferente, llamativo, con carácter y elegante, nunca disonante. Lo mismo ocurre con las llantas Spofec SP2 forjadas de 10×24» (con neumáticos de 295/30 R 24), desarrolladas y fabricadas en colaboración con Vossen.
Su diseño bebe de las creaciones de Rolls-Royce pero elevados a la enésima potencia. Y ya que las llantas son a menudo como una joya, éstas son también personalizables. Están disponibles en hasta 72 colores diferentes para esocger, además de los clásicos acabados metálico cepillado o metálico pulido.
Texto: Daniel Murias
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